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El impacto de los pedidos de GrubHub en las operaciones del café

Original article by Gryffyn May

Al visitar el Campus Center Café después de las 8p.m., lo primero que puede ver son las pilas de contenedores para llevar que cubren las mesas, lleno de recibos de GrubHub.

Aunque el sistema de GrubHub puede ser rápido y conveniente, hay un lado más oscuro cuando se trata del desperdicio que generan los pedidos — ya sea desperdicio de alimentos o desperdicio material de los contenedores, tazas para llevar o envolturas. 

Al final de la noche, muchos de los pedidos son tirados y desperdiciados solo porque la gente no viene a recoger su comida,” dijo Marie Willems ’27, un empleado del café. “No sé si eso es solamente culpa del café, pero al final de la noche todo lo que no se usa necesita desecharse, por lo que va a generar mucho desperdicio.”

Según la Agencía de Protección Ambiental de los Estados Unidos, la forma más común de desperdicio que se encuentra en los vertederos son los desperdicios de alimentos, que representan 24% de los desperdicios sólidos que acaba en los vertederos.

Además de los problemas con el desperdicio de alimentos, los residuos de materiales de solo uso también tienen significativas ramificaciones ambientales, y es uno de los otros problemas con el sistema de pedidos de GrubHub en los cafés. Williems dijo que como empleado del café, es fácil ver el impacto de los residuos de los pedidos porque los contenedores de basura y compost a menudo se desbordan, lo que dificulta separar los materiales compostables de los materiales no compostables.

“A lo largo de mi turno, es muy difícil cuando se pone ocupado prestar atención a dónde va tu basura, y a menudo si el compost está lleno, entonces esa basura acaba en la basura incluso si es compostable,” dijo Willems.

Cuando este sistema parece estar lejos de ser perfecto, Jeremy Bonios, el gerente minorista del Campus Café y The Compass Café dijo que es un aumento con respecto a los sistemas anteriores que tenían menos organización e incluían solo un “shop”. Ahora, hay varias tiendas, como el Swift-Start Café y el Sunrise Griddle.

“Esas múltiples tiendas permiten que cada una de las respectivas estaciones mueven sus pedidos más rápidamente, con el objetivo de que los estudiantes vienen y recojan su comida,” dijo Bonios.

Cuando los pedidos toman mucho tiempo de salir, es menos probable que los estudiantes  recojan sus pedidos a medida que están ocupados o se olvidan del pedido. Con el aumento de la eficiencia del nuevo sistema, los empleados del café pueden procesar los pedidos más rápidamente, aumentar la probabilidad que los pedidos sean recogidos y potencialmente reduciendo la cantidad de desperdicios de pedidos abandonados.

“No he estado contando artículo por artículo, pero si solo miro lo que estamos teniendo que tirar, abonar o reciclar en comparación con lo que estábamos en semestres pasados, ha sido una diferencia notable,” dijo Bonios.

Sin embargo, parece hacer un consenso general de que todavía hay margen de mejora. Aunque la mayoría de los materiales utilizados en los pedidos son técnicamente compostables, todavía quedan problemas con la eliminación de los materiales correctamente.

Bonios dijo que la mayor parte del problema radica en la eliminación incorrecta de los desperdicios por parte de los estudiantes, cómo poner productos no compostables en el contenedor de compost, o viceversa.

El mejor sistema sería si tuviéramos contenedores marcados más claramente, y porque mucho de este material es compostable, si tuviéramos mejores receptáculos para recibir esos desperdicios compostables,” dijo Bonios. “Es genial que [Smith] gaste el dinero y los recursos en productos compostables, pero si la gente no los pone en los lugares correctos […] eso es lo que encuentro que es mi mayor lucha.”

Williems, por otro lado, sugiere que el problema radica en el tamaño de los contenedores de basura.

“Definitivamente creo que Smith podría estar haciendo un mejor trabajo — ¿tal vez solo tener contenedores más largos? Siempre siento que los contenedores de basura se llenan demasiado rápido allí,” dijo Willems. “No se si simplemente no tienen los empleados para vaciarlos, pero en general no creo que tengan contenedores de basura o secciones de compost lo suficientemente largos para la acumulación de basura, y eso hace que las cosas sean más sucias y más difíciles de poner las cosas donde actualmente pertenecen.”

Hay varias ideas sobre lo que se podría hacer para aumentar la situación. Elena Roby ’27 es parte del programa de Rescate de Alimentos que recicla la comida sobrante de los comedores que se sirven en la cocina de La Iglesia Episcopal de St. John. Ella cree que una posible solución radica en el nuevo sistema de pedidos en persona que implementó recientemente en el Campus Center Café. 

“Tal vez la gente que ordena en persona podría recibir su comida en platos reutilizables, etc., las cosas que se usa en los comedores, y que potencialmente podrían cortar los desperdicios a la mitad, si no más. Ese podría ser un primer paso y tal vez podríamos aprovecharlo para reducir el desperdicio de solo uso y también el desperdicio de alimentos,” dijo Roby.

Bonios propone una solución que se basa en los estudiantes, enfocándose más en asegurarse de que los estudiantes recojan su comida y tiren sus desperdicios de manera propiamente.

“Creo que una gran parte de esto sería, no quiero decir que se echen sobre los estudiantes, pero una mayor responsabilidad estudiantil, que sí están pidiendo comida, que realmente vienen y recogen la comida,” dijo Bonios. “Eso puede ser un gran drenaje de recursos y mano de obra, gases de efecto invernadero, lo que sea, si la gente está pidiendo cosas y no lo están recogiendo. Así que necesitamos que hacer que los estudiantes se habituen mejor con realmente recoger la comida que pidieron.”

Seguir adelante, Bonios espera trabajar con otros grupos orientados a la sostenibilidad en el campus, como el Centro para el Medio Ambiente, Diseño Ecológico y Sostenibilidad (CEEDS), para determinar cómo implementar procesos más sostenibles entre las operaciones del café. 

“Me gustaría sentarme con el CEEDS y ver qué se podría hacer. Tuve una reunión con unos estudiantes durante el verano sobre el etiquetado, porque no hay etiquetado consistente alrededor del campus,” dijo Bonios. “Es un poco a discreción del edificio lo que hacen, y creo que sería un gran impulsor para tener una verborrea y fotos consistentes.”

Roby dice que eliminar todo de los materiales de solo uso de los cafés es la solución más ideal y eso debería ser lo que está trabajando hasta en todos los esfuerzos para aumentar la sostenibilidad en el campus.

“Creo que podría hacerse más en general en todo del campus para fomentar el uso de tazas, platos, todos artículos reutilizables, y creo que hay más que Smith podría estar haciendo para disuadir a la gente de usar artículos de solo uso,” dijo Roby.

“Obviamente lo ideal es no usar cosas de solo uso, punto,” dijo Roby. “Sé que no es del todo posible, pero trabajar para limitarlo tanto como sea posible es el objetivo final.”